Cangas de Onís

Cangas de Onís es un pueblo precioso, muy túristico por su enclavamiento y por su historia. Nada mas llegar te recibe un puente romano que se deja fotografiar por todo aquel que queda maravillado ante su porte, un poco deteriorado pero claro hay se ve el paso de los años. Enseguida tenemos una avenida amplia muy transitada por viandantes y vehiculos y es que es la calle más comercial, si quieres algún souvenir allí lo encuentras seguro.
También está la oficina de turismo donde puedes informarte de todo lo que ofrecen esas tierras y sus vecinos para que no te aburras ni un solo instante y además

Nuestra visita fué al atardecer después de haber visitado los Lagos y haber comido por el camino en un restaurante unas fabes con almejas bastante cutres.

Cangas de Onis fué la primera capital del reino de Asturias tras la reconquista de Don Pelayo incluyéndose un representante del pueblo en el Concilio de Oviedo en el año 1115.

En la actualidad y debido al éxito del turismo que lleva miles de visitantes a Covadonga y a los lagos, el pueblo ha experimentado un gran crecimiento económico. Si se pasea por sus calles uno se da cuenta de esto.

Peo sin lugar a dudas lo más representativo de Cangas es el llamado PUENTE ROMANO que realmente no es tal, pues se trata de una construcción mediaval sobre otro que si que era romano.

Hay muchos rincones para ver y disfrutar. Rodeado de montañas estás dentro del parque nacional de los Picos de Europa.

La población de Cangas de Onís está asentada en el entronque de los ríos Sella y Güeña, siendo este último tributario del anterior. En el valle situado entre ambos ríos se encuentra la capilla de la Santa Cruz, que fue un templo de época romana, reconstruido durante el reinado de Favila de Asturias. También está muy cerca de Covadonga, donde podrás visitar el santuario y los lagos.

No dejes de ver el Puente Romano.

Un lugar encantador.

Lo más bonito, sin duda, su Puente Romano en el que puedes de cruzar al otro lado del río Sella.

La gastronomía exquisita y el paisaje muy verde. Lo que me gustó mucho de allí, no sé si es término de allí o no, el embalse de desove del salmón.

Cangas de Onís con su historia y su puente romano (que resulta que no es romano) es digno de ver.

El bosque encantado de Santillan está a unos 10 km de Cangas y nos ha gustado mucho. El paseo por el bosque, el runrún del río, los arboles caídos, la vegetación abundante - un descanso para el alma.

Además de por su famoso puente romano y lo muy cercano que se encuentra de los Lagos de Covadonga merece la pena recorrer sus calles y admirar sus bellos edificios, visitar su pequeña pero bonita iglesia de construcción medieval.

Comimos y pasamos la tarde del domingo paseando por sus calles y mirando todos sus comercios de recuerdos y comida típica. Es bonito y señorial y un buen punto de partida y final para viajes a Picos de Europa

Pueblo interior del oriente asturiano. Recomendable como punto de estancia para gente aficionada al turismo de interior. Tranquilo y con numerosos restaurantes y sidrerías. Cercano al Santuario de la Vírgen de Covadonga, Lagos de Covadonga, Bosque de Beleño, Arriondas, Ribadesella...

Un lugar con pasado donde puedes ir buscando tu futuro o simplemente una fabada de escándalo con una botellita de sidriña de las buenas.
No dejes de ir.
Las mejores cosas estan en sitios como este.
Muy recomendable.

Si buscas un lugar tranquilo para descansar cercano a la montaña y a la playa este es tu sitio. Con
cocina con menaje para preparar tus platos y no gastar un dineral en las vacaciones.

VOLVEREMOS SIN DUDARLO NOS ENAMORAMOS DE TODO ASTURIAS INCREÍBLE NO SE PUEDE EXPLICAR SE TIENE QUE IR Y DISFRUTAR