El sendero transcurre por un lateral de...
El sendero transcurre por un lateral de la Villa de Paterna de Rivera, atravesando la parte baja de la ladera del cerro. En estas zonas agrícola-ganaderas es difícil hallar un sendero de este tipo y cuando se encuentran quiere decir que cuentan con una larga tradición popular. Es el caso de esta ruta que nace directamente en el Paseo El Toyo, el espacio ajardinado de la localidad ubicado en la parte baja de la misma.
Llegando a Paterna de Rivera por la travesía este Paseo ofrece abundante aparcamiento. Hacia su mitad comienza el sendero, a mano izquierda. Nosotros, antes de recorrerlo, tomamos la precaución de ponernos a charlar con dos ancianos del pueblo. Así averiguamos el nombre del sendero, que no figura en ningún cartel y la historia del mismo. Resulta que algunas parejas tenían por costumbre citarse en el Paseo El Toyo cuando apenas era algo más que un descampado. Y, una vez juntos, paseaban por el sendero, que queda lejos de toda mirada indiscreta. Como quiera que en invierno la ruta se llenaba de charcos, al estar en la parte más baja del cerro, y que el mismo acaba en dos grandes charcones, o balsas de decantación, se popularizó dicho nombre para la caminata.
Hace apenas diez años el consistorio decidió mejorar el sendero y darle una utilidad más amplia. Apisonaron el camino, pusieron vallas de madera a lo largo de la misma y en uno de los rincones colocaron diversas barbacoas y mesas. Inmediatamente el sendero se convirtió en lugar de ocio para las familias, por lo que hizo falta ampliar las instalaciones. Igualmente hubo que colocar más vallas y preparar otros caminos que iban a los charcones desde otras calles del pueblo.
En el año 2006, con la excusa de los incendios forestales, se prohíbe el uso de barbacoas y las familias se alejan de un entorno donde no les está permitido divertirse. El sendero queda abandonado y se utiliza actualmente por jóvenes y parejas.
Mide aproximadamente unos 1000 metros y tiene, en algunos tramos, varios caminos paralelos. Tras una subida inicial todo es cuesta abajo hasta llegar a los charcones. Lo penoso es que el sendero está en mal estado, la zona de barbacoas es pura ruina y el resto del camino tiene mucha basura. Al quedar a la trasera del pueblo se está convirtiendo lentamente en un vertedero. Carece de señalización y de zonas umbrías, y el único equipamiento que posee es un parque infantil al inicio del mismo.
