Qasr al-Hallabat

Es el primero de los castillos jordanos, que se visita en la excursión "[poi=359891]Castillos del Desierto[/poi]". Aunque se encuentran principios de presencia nabatea, la construcción conocida pertenece a una pequeña fortaleza romana del siglo II, que fue hecha en roca arenisca. La fortaleza vio cuadruplicado su tamaño por los omeyas, que lo convirtieron en un importante complejo residencial, en medio del desierto, allá por el siglo IV. Estos utilizaron piedra de basalto negro. El complejo incluía un palacio, una mezquita, unas termas ([poi=359571]Hamman As-Sarah[/poi]) y como muy destacable, un complejo sistema hidráulico compuesto, entre otros, por un gran pozo de agua y cinco cisternas. El terremoto del 551 lo dañó seriamente. Después fue transformado en monasterio y por último en palacio. Lo más llamativo son los mosaicos de las diferentes estancias, y algunas piedras en sus paredes con inscripciones que relatan detalles de su construcción.